Cuando se habla de gestión del cambio en las organizaciones, se refiere al proceso de afrontar de forma adecuada y eficaz las transformaciones que, por diferentes circunstancias, deben realizar las entidades y por ende sus trabajadores. La realidad actual es que el entorno laboral está en continuo cambio, obligando a los profesionales a reciclarse constantemente y a poner en práctica sus habilidades blandas para poder actuar eficazmente y adaptarse a ese nuevo ecosistema. Este movimiento continuo de cambios puede ser debido a:
- Los avances tecnológicos.
- La digitalización.
- Las nuevas necesidades de mercado.
- La globalización.
- Situaciones inesperadas que pueden presentarse como sería la que atravesamos ahora con el COVID-19.
- Una crisis, etc.
La gestión del cambio busca:
- Facilitar y conseguir la activación con éxito de los procesos de transformación necesarios ante la situación actual y de futuro de la empresa.
- Favorecer cambios en la cultura empresarial: conjunto de creencias, valores, hábitos y experiencias que definen a una compañía a través de sus trabajadores.
En la gestión del cambio el centro y primordial tienen que ser:
Las personas
Las personas son la clave en la gestión del cambio, ya que
su oposición hará que el cambio sea más lento y probablemente no se
obtengan los resultados esperados.
En la gestión del cambio es necesario:
- Poner a las personas en primer lugar
- Lograr que el cambio sea motivador y para eso el propósito debe estar muy claro.
- Comunicar de forma adecuada la estrategia que se quiere seguir.
- Apoyar desde la empresa el liderazgo y el talento.
- Favorecer una cultura de aprendizaje continuo y de crecimiento.
- Desarrollar un liderazgo inclusivo buscando el compromiso de todos.
- Lograr en la organización, un ambiente abierto y de debate.
Posiblemente, la situación actual (COVID-19) va a precipitar muchos cambios y, será necesario afrontarlos cuanto antes. Quizás, como Coque Malla nos dice en la banda sonora de "Campeones", dirigida por Javier Fesser: "Este es el momento".
El cambio llega para las organizaciones y para sus empleados. Y cuando llega, es el momento de desarrollar, como trabajadores, la habilidad social de adaptación y de gestión de ese cambio. Toda persona necesita un tiempo para entender, comprometerse
y ajustarse ante esa nueva situación. Se tiene que ver como una mejora no como una
amenaza. Para ello es importante que la empresa propicie la comunicación bidireccional, que la plantilla se involucre y que se sienta una parte importante del proceso. Pero, de cualquier modo, el hecho es que el miedo al cambio es algo natural.
En un artículo de su blog (http://www.elmiracielos.com/innovacion/el-miedo-al-cambio-el-cuento-de-la-osita-krispy/), Ángel Gavín afirma que:
"Miedo al cambio. Miedo a lo desconocido. Siempre ha estado
ahí. Miedo que (las más de las veces) solo se combate ante la constatación de
que el cambio es irremediable, irreversible, y que no puede simplemente
ignorarse. Que hay que luchar y adaptarse a él. Para sobrevivir". Gavín hace referencia a ese miedo con la frase "Nunca abandones la cueva" que aparece en el guion de la película “Los
Croods: una aventura prehistórica”
Las etapas de la curva del cambio
Pilar Jericó, empresaria y comunicadora considerada un referente internacional en "NoMiedo y Change Mindset" (https://www.pilarjerico.com/sobre-mi/), habla de la curva del cambio y de las etapas por las que se pasa ante un proceso que va suponer una transformación. El modelo de Jericó tiene su origen en los estudios sobre el duelo realizados por la psiquiatra, Elisabeth Kübler-Ross.
Cambios a nivel individual
Pilar Jericó lanza 5 claves para poder superar de forma positiva esa curva del cambio:
- Clave 1: Soñar y decidir. Imaginar en positivo el resultado de ese cambio.
- Clave 2:Pasión y disfrute. Enamorarse de lo que se está haciendo para hacerlo disfrutando.
- Clave 3: Aprendizaje continuo.
- Clave 4: Trabajo en equipo.
- Clave 5: Compromiso y valores
Para reducir la resistencia al cambio de los trabajadores:
Cambios a nivel de organización
A nivel de organización, John Kotter, profesor en la Escuela de Negocios de Harvard y
figura reconocida en teorías sobre la gestión del cambio, propone 8 pasos hacia
un cambio efectivo:
- Generar urgencias: para que el cambio funcione es necesario que toda la organización lo desee. Intentar generar, en la medida de lo posible, la sensación de urgencia entre las personas para iniciar el proceso de cambio.
- Crear un equipo rector: conocida la urgencia es conveniente contar con un líder que promueva y ejecute la gestión del cambio. A su vez formará un equipo que reúna dotes de liderazgo, sean influyentes en sus departamentos y crean firmemente en el proyecto.
- Desarrollar la estrategia: reunir y aglutinar todas las ideas y visiones que se quieren llevar a cabo en una única estrategia global.
- Comunicar la visión del cambio: utilizar todas las plataformas de comunicación de la organización para transmitir la visión del cambio de forma clara y concisa.
- Eliminar los obstáculos: Se trata de buscar estrategias para minimizar todas aquellas barreras que se resisten al cambio.
- Alcanzar los primeros logros: el proyecto debe estar planificado para conseguir logros en un breve espacio de tiempo y no centrarse sólo en el largo plazo. Paso a paso se obtendrán beneficios mayores.
- Consolidar éxitos y generar más cambios: tras los primeros logros consolidados, se puede aspirar a lograr cambios a largo plazo.
- Anclar el cambio a la cultura de la empresa: una estrategia de gestión del cambio óptimo es necesario vincularla a la visión global de la compañía. El cambio debe ser visible en el mayor número de aspectos de la organización.
El ciclo de vida del cambio se ajusta a unas etapas y a unos procesos determinados:
- Formulación del cambio.
- Plan de cambio.
- Implementación del cambio.
- Administrar la transición.
- Mantenimiento del cambio.
De cualquier modo, esta soft skill, al igual que otras, como puede ser la comunicación verbal y no verbal o la inteligencia emocional, puede ser entrenada en el aula donde se puede preparar al alumnado para que alcance la capacidad de adaptabilidad a la cultura empresarial y una actitud flexible y colaborativa frente a los cambios. En el ámbito laboral se considera que un empleado que participe, aporte su visión y acepte los cambios crecerá y estará abierto a nuevas posibilidades.
Más información sobre gestión de cambio en el ámbito empresarial:
